Cómo elegir un colchón es complicado en sí mismo. Pero si estás en el punto en el que te preguntas cuál es la diferencia entre los tamaños de colchón full y queen, has venido al lugar correcto. Cuando se mide, una cama tamaño queen suele medir 60" x 80" y una cama completa mide 54" x 75". Si bien la reina tiene solo una talla más que la completa, la diferencia de largo y ancho puede afectar su higiene del sueño. Ambos tamaños son populares: casi la mitad de los adultos estadounidenses duermen en colchones tamaño queen, siendo el tamaño completo el segundo más popular.

Además de las dimensiones del colchón, otras distinciones entre los dos incluyen el precio, el tamaño de la habitación y los niveles de comodidad. El precio de una cama tamaño queen es más caro que el de una cama tamaño queen y, como se necesitan sábanas, mantas o fundas nórdicas más grandes para adaptarse al tamaño más grande, la ropa de cama también será más costosa. Sin embargo, al considerar las diferencias de tamaño de los colchones, la inversión adicional suele valer la pena.

Otro factor a considerar es lo que puede contener su dormitorio y cuál será la configuración. ¿Cuánto espacio quieres a cada lado de la cama? ¿Qué otros muebles deben caber en la habitación además del colchón? Considere las dimensiones del dormitorio al decidir qué colchón tiene más sentido. Puede ser más fácil maniobrar un colchón de tamaño completo en una habitación que tratar de alcanzar el largo y el ancho de una cama tamaño queen.

Por último, pero no menos importante, está el nivel de comodidad. En resumen, una cama más grande significa más espacio para estirarse, moverse y sentirse relajado. Esto es especialmente importante si hay dos personas que duermen contra una. Las pulgadas adicionales de un colchón tamaño queen son útiles cuando hay dos personas de diferentes alturas, pesos y estilos de dormir. Incluso si por la noche te quedas principalmente en una posición para dormir, no querrás sentirte agobiado o incapaz de recostarte libremente y tener un sueño reparador.

¿Qué es un colchón tamaño queen dividido?

Aunque los colchones tamaño queen y full son los más populares, existe otra alternativa. Si ha oído hablar de este estilo y se ha preguntado qué es un colchón tamaño queen dividido, es como suena. La altura y el ancho equivalen al tamaño de una cama tamaño queen estándar, pero hay dos colchones separados en una estructura de cama. Esta opción es preferible para parejas que tienen necesidades de sueño muy diferentes.

Por ejemplo, una persona puede preferir un colchón más firme, mientras que la otra necesita más cojín. O bien, a uno de los que duermen le gusta una temperatura más fresca, mientras que el otro quiere un toque más cálido. El diseño moderno permite a las personas personalizar su forma de dormir, ya sea con dos colchones separados o utilizando tecnología para personalizar cada lado. El Pod le da a cada persona control sobre la temperatura de su lado del colchón para iniciar un sueño reparador. Los sensores se adaptan a sus cambios biométricos durante la noche y se ajustan para adaptarse a su preferencia de temperatura en todo momento.

Síntomas de dormir en un colchón del tamaño incorrecto

Hay características físicas que le avisarán cuando llegue el momento de comprar un colchón nuevo. Está desgastado, los resortes hacen ruido y puedes sentir el cambio de peso cuando tú o tu pareja se mueven durante la noche. También existen problemas relacionados con el sueño que indican que es posible que su colchón necesite un reemplazo. Estos síntomas incluyen:

Dolor muscular, especialmente en la parte baja de la espalda y el cuello. Sueño inquieto o dificultad para conciliar el sueño. Fatiga al día siguiente. Incapacidad para concentrarse. Rutinas de sueño irregulares.

Si bien hay varios factores que entran en juego con la falta de sueño, es posible que usted esté pasando por alto su colchón. Si no se siente cómodo mientras duerme, puede impedir que alcance los niveles profundos de su ciclo de sueño y despertarlo más de lo que cree en varios momentos durante la noche. Al comprar un colchón nuevo y obtener el tamaño que mejor funcione, puede eliminarlo como uno de los problemas que le provocan la pérdida de sueño.

El momento adecuado para cambiar de colchón

Para aquellos que experimentan trastornos del sueño o falta de sueño, considere si la edad de su colchón les impide descansar bien por la noche. Se recomienda cambiar los colchones cada 10 años. En esta época es cuando tienden a perder su rebote y es posible que no brinden tanto apoyo. Este cronograma puede ser anterior dependiendo del estado de su colchón y de cómo afecta su sueño. Si se despierta con frecuencia con dolor en la parte baja de la espalda o el cuello, un colchón nuevo puede ser la clave. Tenga en cuenta que su preferencia probablemente cambiará con el paso de los años. A medida que envejece, es posible que necesite un colchón más firme para sentirse con el apoyo adecuado.

Las investigaciones muestran que existe una correlación entre el dolor de espalda y la mala calidad del sueño y las camas con al menos cinco años de antigüedad. A study published by the Journal of Chiropractic Medicine analyzed participants with no clinical history of sleep disturbances to track progress over 28 days in their own beds versus 28 days on a new bedding system. Un estudio publicado por el Journal of Chiropractic Medicine analizó a participantes sin antecedentes clínicos de alteraciones del sueño para realizar un seguimiento del progreso durante 28 días en sus propias camas versus 28 días en un nuevo sistema de ropa de cama. Los resultados mostraron mejoras significativas entre los marcadores previos y posteriores a la prueba en dolor de espalda, estrés y calidad y eficiencia del sueño. Además, se observó una mejora continua cada cuatro semanas del período de recopilación de datos después de dormir en una cama nueva.

Además de esta sugerencia sobre cuándo se debe reemplazar un colchón, considere cambiar el colchón si también se muda de casa. Es un momento oportuno para hacer un inventario de la configuración de su dormitorio y actualizarlo todo. Tome medidas del dormitorio y decida si su marco estándar cabe. Y, si ha tenido un colchón de tamaño completo durante varios años, considere si es hora de actualizarlo y tener más espacio. No querrás sentirte apretado en tu espacio o en el colchón, así que asegúrate de elegir según lo que tu cuerpo necesita actualmente.

Mantener el ambiente ideal para dormir

Tener un colchón que se adapte a su dormitorio y a su comodidad personal es una de las partes principales para crear un ambiente ideal para dormir. Como lugar donde descansas y te refrescas noche tras noche, tener la mejor opción posible es fundamental. Hay varias formas adicionales de mejorar la calidad de su sueño realizando cambios en la iluminación, la temperatura y la ropa de cama de su habitación.

Elimina la luz del dormitorio. Incluso una pequeña cantidad de brillo proveniente de las luces nocturnas automáticas o la luz azul que emite su teléfono cuando recibe una notificación puede causar interrupciones en el sueño. Opte por persianas de lamas en lugar de cortinas si desea que la luz natural siga entrando por la mañana, pero de lo contrario, manténgala lo más oscura posible. Baja la temperatura de tu habitación. Un dormitorio frío es beneficioso para ayudarle a conciliar el sueño rápidamente y a tener un sueño más profundo de forma constante. La mejor temperatura para dormir es entre 60 y 67 grados. Una habitación demasiado calurosa o que no recibe suficiente ventilación provoca un sueño inquieto. Si eres propenso a quitarte las sábanas en medio de la noche, colchón queen size es probable que necesites bajar el termostato o abrir una ventana para dejar entrar aire fresco. Haz de tu dormitorio un espacio relajante y libre de distracciones. Manténgalo ordenado e introduzca elementos relajantes como una máquina de sonido relajante o aromaterapia para ayudar a inducir la somnolencia. Trate de mantener los aparatos electrónicos fuera del dormitorio como parte de una rutina de sueño saludable. La luz azul -además de la ansiedad que puede provocar permanecer conectado digitalmente- dificultará conciliar un sueño reparador. Cambia tu ropa de cama cuando sea necesario. Las almohadas y sábanas deben cambiarse cada dos años por otras nuevas, pero también hay que tener en cuenta el material más adecuado para la temporada. Durante el verano, las sábanas ligeras de algodón refrescarán mucho más que un material de franela más grueso. Lo mismo ocurre con cambiar una funda nórdica pesada por una manta más ligera cuando llegan los meses más cálidos.

Configurar su dormitorio para que sea más propicio para dormir comienza con tener el colchón del tamaño adecuado, seguido de crear un ambiente fresco y oscuro, agregar elementos relajantes, eliminar distracciones y actualizar la ropa de cama de forma rotativa. Cada parte es de igual importancia. Cambiar su espacio físico le permite concentrarse en factores emocionales o psicológicos que pueden impedirle dormir la cantidad de horas que necesita para sentirse saludable.

En caso de duda, opte por el tamaño Queen

El colchón tamaño queen es el más popular por una razón. Se adapta cómodamente a una persona que duerme individualmente y es apropiado para una pareja ya que proporciona suficiente espacio para adoptar varias posiciones para dormir. Además, la mayoría de los tamaños de habitaciones están diseñados para contener un colchón tamaño queen en comparación con las medidas de una cama tamaño king más grande o de un tamaño tamaño king California. No solo experimentará la comodidad de tener más espacio, sino también la posibilidad de disfrutar de un sueño continuo y de calidad.

Hay factores que pueden afectar negativamente qué tan bien y cuánto duerme cada noche. Asegúrese de que el tamaño de su cama y colchón no sea uno de ellos. Identifique y adapte los cambios a lo largo de los años con respecto a sus preferencias de sueño para mantener un dominio pacífico.